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Mauricio Antezana: Breve biografía política del vocero de Goni
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jugueterabioso oct 2003 por: Iván Castellón Quiroga
Militó en la facción más extrema del trotskismo y desde allí combatió al propio Guillermo Lora, conspiró contra la UDP y se puso en contra de Marcelo Quiroga Santa Cruz, del mismo modo en que difamó a Jaime Solares acusándolo de paramilitar. Su estilo fue más allá del simple transfugio y nos sugiere a un adiestrado agente, sostiene el autor
En la primera y en la última gestión del Goni, Mauricio Antezana aparece como su colaborador más cercano y de confianza, cumpliendo funciones que regularmente tendrían que ser atendidas ya sea por el «vice», el ministro del interior, el ministro secretario de la presidencia o como en otras gestiones por el ministro de informaciones, vale decir, dar la versión gubernamental sobre alguna politica implementada, algún conflicto social enfrentado o, simplemente, explicar y corregir los lapsus lingüis del presidente.
No habría nada de raro en que Mauricio Antezana se desempeñara en ese previlegiado cargo si no fuera porque este político algunos años atrás no pertenecía al entorno social e ideológico del Goni y la oligarquía, siendo, por el contrario, un ferviente animador de las
luchas sociales en su versión más radicalizada: el trotskismo. En efecto, Mauricio Antezana era un conocido militante y dirigente del POR-Combate, un partido que en los ochentas representaba la ultra y extrema izquierda del POR-Lora.
Ademas de apoyar las luchas sociales de aquellos años, Antezana entusiasmaba a estudiantes universitarios a conformar grupos armados, bajo el supuesto de que un gobierno socialista, anti-burgués y antimperialista, no podría tener éxito si no fuera por la violencia ejercida de una clase sobre otra, es decir, del proletariado sobre la burguesía.
Pero no sólo eso, operando desde el POR-Combate, Mauricio Antezana era también conocido por hacer labor «anti-izquierdista», es decir, hacer mala propaganda del POR-Lora, de la UDP, de entablar riñas discursivas con las organizaciones marxistas del país, y con el propio partido de Marcelo Quiroga Santa Cruz.
Finalmente, durante su reciente función como vocero de Goni en esa misma lógica, fué él quien desató una sañuda campaña de desprestigio contra el actual ejecutivo de la COB Jaime Solares, también ex militante trotskista, con la calumnia de que el dirigiente obrero habría sido cólaborador de paramilitares.
MATANDO A MARCELO
Después del golpe de Garcia Meza, Antezana se auto exilió a México, desapareció unos años para retornar al ámbito político boliviano a principios de los noventas, pero sorpresivamente ubicado a lado de los más recalcinantes neoliberales y vendepatrias. Un análisis superficial de este caso, nos conduciría a calificar el misma como un caso de transfugio, un «delito» común entre los oportunistas, pero por otras evidencias manifestadas por el propio Antezana, como animador trotskista primero y luego como asesor político-militar del gringo Sánchez y del otro Sánchez, habría que interrogar más a fondo:
No podríamos arribar a respuestas concluyentes, pero podríamos seguir ahondando con otros cuestionamientos:
Sólo después que murió el líder socialista Antezana en un acto que recuerda a Napoleón, quien solía homenajear a sus opositores muertos con su célebre «el cadáver del enemigo huele bien», escribió las siguientes notas frente al golpe de Banzer (1971), «en las calles de La Paz, junto a los trabajadores, fusil entre manos, el dirigiente socialista Marcelo Quiroga Santa Cruz visualizó con claridad meridiana la estrategia revolucionaria… e inauguró lo que se dio en llamar un nuevo estilo de hacer política y, evidentemente era nuevo, pero, ante todo nuevo por su contenido declaradamente socialista y revolucionario… Para 1979, Marcelo Quiroga Santa Cruz era el titular de la corriente revolucionaria».
Si esto pensaba del lider socialista, por qué entonces discrepó con él?. ¿Por qué no lo colaboró tan estrecha y militantemente como lo hace hoy con el Goni y la política norteamericana?.
En realidad:
En otras palabras:
UN CLAN DE TRÁNSFUGAS
Pero no sólo eso es el caso de Mauricio Antezana, lo acompañan otros que manifiestan las mismas particularidades, de quienes se puede sospechar lo mismo y mandarles las mismas interrogantes. Ahí está José Luis Harb, exhibiendo su traza de funcionario del ministerio del interior. Antes, éste era otro infiltrado que dirigía movimientos de protesta y lanzaba discursos incendiarios en la Plaza Principal y desde la Central Obrera Departamental de Cochabamba. O qué pensar de Cayetano Llobet, antaño «compañero de lucha» de Marcelo Quiroga y ahora un sujeto mediático del neo liberalismo.
La pregunta final entonces:
Si no pueden, la pregunta ¿tránsfugas o agentes de la CIA? revelaría a más de uno.
3 Las respuestas a “tránsfugas o agentes”
Andres
Lo conozco personalmente es persona honesta con las mejores intenciones. Aunque no estoy de acuerdo con sus posiciones políticas al momento, los políticos y las personas tienen derecho a cambiar de opinion. Agente de la CIA? no me hagan reir (o llorar) Castellon Quiroga sabe que era marido de la hija de Marcelo Quiroga Santa Cruz?
GIORGIO MALIGNO
QUE BIEN, SERIA BUENO TENER MAS DATOS MI BUEN IVAN SOBRE TODO HOY, HOY EL CAOS QUE MERMA EN LA POLITICA, LAS TRAICIONES ENTRE ALLEGADOS Y PASA-PASAS unridegiora@hotmail.com Y SEAMOS MAS SERIOS CUANDO SE HACE CRITICAS
José Miranda
Iván sería bueno que hagas una lista completa de todos los trotskistas que terminaron en las posiciones de derecha más extremas, incluí a Fernando Molina y otros parásitos que se convirtieron en paladines de Sánchez de Lozada, esto para que los bolivianos sepan bien quienes son y que este tipo de gente nunca más tiene que estar en poder de decidir algo porque lo que está pasando hoy es consecuencia de su avaricia y su amor al poder político, de su angurria por buenos cargos, influencia y obviamente platita. Así que aún se camuflen de intelectuales, es menester desenmascararlos porque los que hoy se quejan del gobierno de Evo deben saber que esto que vivimos hoy es producto de gente como Antezana, Molina y otros ex camaradas