Cumbre concluye con apoyo la demanda marítima y pide un tribunal climático
Luego de dos días de intenso debate, la II Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático y Defensa de la Vida, celebrada en Bolivia, planteó un cambio de paradigma, del modelo industrial capitalista inmisericorde con la naturaleza a un nuevo civilizatorio, en comunión con la Madre Tierra, en consonancia con las urgencias con que asumirá en diciembre que viene el drama ambiental la Conferencia de las Partes (COP21) de Francia.
Entre las consideraciones propuestas en 12 mesas están el apoyo a la demanda marítima y la creación del un Tribunal de Internacional de Justicia Climática.
La Conferencia Mundial de los Pueblos, homologada por la Organización de las Naciones Unidas (NNNU), propuso la creación de un garante tribunal internacional de justicia ambiental, cosa que no vaya a pasarle lo que a la COP3 que no pudo llevar a la práctica el desacatado Protocolo de Kyoto de 1997.
Casi 8.000 delegados de organismos civiles llegados de 50 países de 5 continentes aprobaron ayer lunes, tras 3 días de intensos debates, la Declaración de Tiquipaya que urgió limitar el nivel del calentamiento global en no más de 2 grados Celsius y también las emisiones de gases venenosos de efecto invernadero.
«Tenemos que poner en marcha un nuevo modelo civilizatorio que valore la cultura de la vida y la cultura de la paz, que es el Vivir Bien.
El mundo precisa transitar hacia la visión holística del Vivir Bien, profundizando la complementariedad entre los derechos de los pueblos y los derechos de la Madre Tierra, que implica construir una relación de equilibrio entre los seres humanos con la naturaleza para restablecer la armonía con la Madre Tierra.
El Vivir Bien en armonía con la Madre Tierra es el nuevo modelo de civilización para preservar la comunidad de vida, donde la Madre Tierra es un ser vivo sagrado y no un objeto para la explotación de los seres humanos», profesa la Declaración de Tiquipaya.
El canciller de Francia, Laurent Fabius, que presidirá la COP21 comprometió el sábado en este municipio boliviano sus denuedos para que 195 países asuman en París la filosofía de la Conferencia Mundial de Los Pueblos patente en esta declaración.
Fundadas en los desacatos del pasado reciente por parte de las potencias industriales, las organizaciones civiles reunidas en Tiquipaya los últimos 3 días urgieron la creación de un tribunal internacional que garantice la aplicación de las eventuales resoluciones de la COP21 que debe redactar el nuevo vademécum del Planeta.
«Se deberá crear un Tribunal Internacional de Justicia Climática y de la Madre Tierra, como propuesta de nuestros Pueblos, que sea un órgano judicial independiente, articulado por la Convención de las Naciones Unidas, para adjudicar controversias derivadas de la interpretación e implementación de las acciones necesarias para responder al cambio climático.
El Tribunal deberá además ayudar a resolver los problemas de acción colectiva asociados con la falta de cumplimento de los compromisos de países desarrollados en respuesta al cambio climático.
El Tribunal debe tener jurisdicción sobre cualquier controversia relativa e impacto causado por la falta de implementación en buena fe de acciones relativas al cambio climático y estar basado en la sabiduría de la justicia de las naciones de los Pueblos Indígenas», dice un aparte de la Declaración de Tiquipaya.
«Impulsar el acceso soberano al mar para el pueblo boliviano, apoyando la demanda marítima en la Corte Internacional de Justicia de La Haya, para generar el espacio de diálogo que resuelva los temas pendientes entre los hermanos países de Bolivia y Chile», cita también la Declaración de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y la Defensa por la Vida aprobada en Tiquipaya.
La Declaración de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y la Defensa por la Vida también resolvió la aplicación de los principios ancestrales del Ama Sua (no seas ladrón), Ama llulla (no seas mentiroso) y el Ama Quella (no seas flojo), que incluso fueron reconocidos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El presidente anfitrión de la Conferencia de los Pueblos, Evo Morales, aseguró que las resoluciones de Tiquipaya serán presentadas y defendidas en la COP21.
«Todas las conclusiones de este evento, vamos a llevar a París, no sólo vamos a llevar, sino que vamos a defender. Preferimos estar sometidos a los pueblos y no a los imperios, y esa es nuestra lucha», remarcó.
A su turno Rafael Correa, presidente de Ecuador advirtió que el eventual fracaso de la COP21 equivaldría al principio del fin de la vida en el planeta.
«Es una lucha política. A finales de este año estaremos en la COP21 y si esta conferencia fracasara y no logramos acuerdos vinculantes para proteger el planeta podría empezar el entierro de nuestra civilización», aseguró.
Por último el líder venezolano Nicolás Maduro aseguró que los pueblos darán batalla para defender su hábitat.
«Vamos a París a batallar una vez más con la rabia de la injusticia y la mentira. Desde ya debemos garantizar como gobiernos pueblos que somos, obedientes a nuestros movimientos sociales, que la Cumbre de París sea sobre todo una cumbre de los pueblos organizados, de los movimientos que defienden el planeta.
Una gran movilización donde se encuentre la juventud y los pueblos de Europa, de África, de Asia, de América Latina, del Caribe, de los Estados Unidos, un solo pueblo «, remarcó.
Correa y Maduro dieron cuerpo a la Conferencia de Tiquipaya donde el secretario general de las NNUU, Ban Ki moon, se comprometió a erradicar la pobreza hasta 2030.
Hasta Tiquipaya llegaron el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, el laureado activista argentinos de los derechos humanos Adolfo Pérez Esquivel y entre otros el abogado español Baltazar Garzón.
Evo Morales afirma que el capitalismo es el cáncer del planeta
El presidente boliviano, Evo Morales, acusó al capitalismo de ser el cáncer que destruye poco a poco la vida de la Madre Tierra, al iniciar hoy aquí, la II Cumbre Mundial sobre Cambio Climático.
Hermanas y hermanos, para el capitalismo la solución de la crisis climática son los mercados de carbono, esos que mueven millones de dólares en el mundo pero sin logros, más bien ocasionando daños al planeta, yo, diría que ese sistema es el cáncer que destruye la vida de la Pacha Mama -Madre tierra-, aseveró Morales en la inauguración del cónclave.
Los países desarrollados, dijo, “quieren que las naciones del Sur logren satisfacer sus necesidades básicas con cero de emisiones de dióxido de carbono, a ellos, solo queremos decirles que los países del Sur no serán jamás los guardabosques del sistema capitalista, precisó.
Ellos, agregó, dicen que no tienen presupuesto para ayudar a los países menos desarrollados, ni para contrarrestar la crisis climática, sin embargo, sí tienen para llevar adelante guerras y puso como ejemplo, los 900 mil millones de dólares utilizados por la OTAN para invadir países so pretexto de terrorismo”, pero con el único objetivo de adueñarse de sus recursos naturales.
En esa línea, Morales reiteró que para el capitalismo la solución para combatir esos efectos climáticos es la utilización de nuevas tecnologías cada vez más caras y sofisticadas, la creación de depósitos para la captura del carbono, radiación solar, vías que laceran la vida de nuestro planeta, remarcó.
Para el sistema capitalista el medio ambiente, reafirmó, es objeto de saqueo y de explotación de sus recursos, por eso los pueblos del mundo comenzaron a unirse, a organizarse para salvar al planeta, proponiendo medidas que permitirán resolver los problemas que tiene la humanidad.
Qué tenemos que plantearnos aquí hermanos, preguntó el dignatario, debemos encontrar una alianza de los pueblos del sur con los del norte; construir un movimiento mundial de los grupos sociales para tres aspectos fundamentales, recuperar la relación entre la vida y la madre tierra y acabar con el sistema capitalista.
Por culpa del capitalismo, destacó, hay egoísmo, individualismo, mercado, saqueo, guerras e industria del armamento, por lo que debemos luchar por cambiar ese modelo que no ha resuelto nada y lo que trae es más crisis, más hambre, más pobreza y diferencias entre los países desarrollados y los que están en desarrollo.
El presidente agregó que también se debe crear una Corte Internacional de Justicia para la defensa de la Madre Tierra, y que los países que no cumplan con los tratados para contrarrestar los efectos del cambio climáticos sean juzgados allí.
Morales instó a los participantes a mantener la unidad como elemento fundamental para lograr los objetivos que se reproduzcan de esta Cumbre, y manifestó que confía en que a través de esta integración universal, con el aporte de sus gobiernos, de sus científicos, se encuentren las bases para salvar la existencia humana y del planeta.
Por eso quiero que su presencia aquí no sea en vano y que sus iniciativas repercutan en la Cumbre climática que se desarrollará a finales de año en París, resaltó.
Las conclusiones de la II Cumbre Mundial sobre el Cuidado del Medio Ambiente y por la Vida de la Madre Tierra, se presentarán en la Cumbre Mundial del Clima que se realizará en París, Francia, del 30 de noviembre al 11 de diciembre de 2015 con la participación de jefes de Estados de todo el mundo.