Patricio Montesinos La vida del líder de esta nación andina fue puesta en peligro en las últimas horas por la determinación de los gobiernos de Francia, Portugal, Italia y España de negarle el sobrevuelo por esos Estados de la Unión Europea (UE) a la nave aérea donde viajaba Morales. El avión del mandatario boliviano se vio obligado a hacer un aterrizaje forzoso en Viena, Austria, país de la UE no miembro de la guerrerista Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), y permanecer allí durante más de 13 horas por la conducta discriminatoria y vergonzosa de las autoridades de Paris, Lisboa, Roma y Madrid. Sobre las espaldas de esos gobiernos del también llamado Viejo Continente, todos sumisos al régimen de Estados Unidos, pesa ahora la responsabilidad de jugar con la vida de un mandatario latinoamericano, por lo que merecen una respuesta contundente de las organizaciones integracionistas de la Patria Grande y de las Naciones Unidas. Es muy grave lo que ocurrió con Morales y una ofensa contra él y el pueblo boliviano, coincidieron Jefes de Estado, políticos, Movimientos Sociales y ciudadanos de a pie de América Latina, ante las decisiones de Francia, Portugal, Italia y España, claramente instruidas por Washington. El presidente de Bolivia representa hoy y para siempre la dignidad de América Latina contra la vergüenza de Europa, que actuó de manera colonialista e imperial, coincidieron analistas y medios de prensa en esta región. Las mismas fuentes concordaron en que en lo adelante la Patria Grande debe proceder de diferente forma ante los ejecutivos de la UE que afrentaron sin escrúpulo alguno a Morales. El secretario general de UNASUR, el venezolano, Alí Rodríguez Araque, además de condenar la postura de Europa, señaló que las Cumbres Iberoamericanas carecen de sentido alguno actualmente, luego de las conductas asumidas por España y Portugal. Por su parte, el gobierno y parlamento bolivianos dejaron bien claro que denunciarán lo sucedido con su máximo dirigente ante todas las organizaciones internacionales, incluida la ONU, y se reservarán el derecho de adoptar medidas concretas hacia los ejecutivos de Paris, Lisboa, Roma y Madrid. Una vez más se puso en evidencia que Europa responde a los preceptos imperiales de Estados Unidos, y su actitud hacia Latinoamérica no ha dejado de nunca de ser colonialista y discriminatoria. |