cambio.bo La denuncia tiene consonancia con las revelaciones que hizo el vicepresidente Álvaro García Linera en la plenaria de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP), donde se sancionó la Ley de Protección del Tipnis. “Tengo información de que hay siete empresas que sacan troncas del Parque Isiboro Sécure. ¿Quién las autoriza para sacar mara (madera preciosa en extinción) de un parque? Todas son ilegales. Tengo información, del lado de Ichoa, de que hay un plan de manejo, pero no de mara, sino de otras maderas”, dijo Salazar, legislador del MAS. Es más, denunció que una delegación compuesta por técnicos del Comité de Tierra, Territorio y Recursos Naturales del Senado en una incursión halló a los madereros, que les negaron el libre tránsito por el Tipnis para tapar evidencias sobre la indiscriminada deforestación en el lugar. “Mandé técnicos para que pudieran ingresar del lado de San Ignacio de Moxos a Monte Grande y los tronqueros no les permitieron ingresar, pero pudimos constatar que hay árboles de madera mara marcadas para cortar”, señaló Salazar, quien preside ese Comité. El asambleísta explicó que de una tronca de mara, considerada una especie preciosa, puede salir hasta mil pies de madera; cada pie es comercializado hasta en 20 bolivianos. En ese sentido, cada árbol talado podría tener un precio de hasta 20 mil bolivianos, de los cuales los habitantes del Tipnis no reciben ningún rédito, sólo algunos “regalos” pequeños, con lo que se conforman. Otro problema con la explotación ilegal de maderas, sean o no preciosas, es que al ser un emprendimiento ilícito los madereros de manera artesanal talan los árboles usando sierras eléctricas para obtener solamente el tronco, y abandonan las ramas, que pueden ser aprovechadas. No existen políticas de manejo forestal. Complicidad “En algún momento decíamos que nuestros hermanos indígenas están defendiendo a los tronqueros y terratenientes; como trabajan poco, tienen esa dependencia y las empresas se aprovechan de la costumbre que tienen los indígenas”, dijo. Salazar denunció también que en el Tipnis existen hoteles y gente extraña que aprovecha los recursos naturales sin dar ningún beneficio a los indígenas del lugar. Marcha por el Tipnis “En cualquier momento cualquier diputado, con la Ley de Protección del Tipnis, pedirá el desalojo de las madereras, que no pueden seguir explotando madera”, aseveró el senador. Existen pistas de aterrizaje y hoteles García reveló que en la extensa área del parque operan empresas de turismo, madereras, tronqueros y hasta de explotación de lagartos. “La empresa Asunto Uswea, empresa Isigo SRL, tienen un acuerdo para la explotación de madera por 34.000 hectáreas dentro del parque; la empresa Isigo SRL tiene un acuerdo para extracción de madera en Oromomo Areruta por 34.000 hectáreas; la otra es Suri SRL con 40.000 hectáreas para la extracción de madera dentro del parque, Bloque 1 Tipnis, con 24.000 hectáreas hacia el sur, Subcentral Tipnis, con 7.000 hectáreas dentro del parque”, precisó García. También identificó a los aserraderos Santa Inés y Universal, los que, según aseguró, tienen acuerdos para actividades turísticas y de pesca exclusivamente para extranjeros. Los dueños de esta actividad cerca al río sécure, según informes, son ciudadanos argentinos y norteamericanos. El Vicepresidente también denunció la existencia de dos pistas. “La primera en la Asunta y la segunda en Oromomo. Tenemos las fotos dentro del Parque Isiboro Sécure, (también) hay hoteles de cinco estrellas”, reveló. Por ello, instó a los dirigentes indígenas a trabajar la reglamentación de la Ley de Protección del Tipnis, para garantizar las condiciones de vida de los lugareños. |