Marco Cáceres diariolaprimeraperu.com El gobierno negó en todos sus extremos la posibilidad de la instalación de una base militar norteamericana en nuestro país; sin embargo, LA PRIMERA tuvo acceso a un documento oficial que acredita que el Ministerio de Defensa coordinó con el ex comandante general del Ejército, Edwin Donayre, a solicitud de Estados Unidos de América, la construcción de un Centro de Operaciones e Inteligencia Conjunto en la base de Pichari en el Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE). Mediante el oficio 058 VPD/A/SEC, fechado el 10 de marzo del 2008, la viceministra de Políticas para la Defensa, Nuria Esparch Fernández, manifiesta a Donayre que el ministerio del sector coordinó con el Comando Sur, a través del Grupo Consultivo y de Ayuda Militar de los Estados Unidos de América, el proyecto de construcción de “un Centro de Asistencia Médica y un Centro de Operaciones e Inteligencia Conjunto en el terreno donde se encuentra estacionado el Ejército en Pichari”. En tal sentido, Esparch solicitó se remitan a su despacho los documentos que acrediten que el terreno pertenece a las Fuerzas Armadas y encargó realizar los enlaces necesarios para tal fin al contralmirante Mario Sánchez Debernardi, director general de Política y Estrategia del Ministerio de Defensa. Fuentes de este diario sostuvieron que este Centro de Operaciones e Inteligencia Conjunto viene operando en el VRAE desde finales del año pasado y aclararon que para ello no eran necesarios cuatro muros y una bandera, tal como imaginamos una base militar. Añadieron que la supuesta intromisión de Estados Unidos en los asuntos internos del Perú está comprobada con el documento que hoy exhibimos, pues para que estos centros operen sólo se necesita un espacio para acopio de Inteligencia o de presencia de instrumental para el monitoreo de comunicaciones. LA PRIMERA trató de contactarse telefónicamente con el contralmirante Sánchez Debernardi para que confirme si edificó o no esta instalación dentro de la base de Pichari, el centro de comando de las operaciones del Plan VRAE; pero el oficial no respondió. Su esposa nos informó que él está fuera del país en una misión encargada por el sector Defensa. Este diario también llamó sin suerte al ministro de Defensa, Ántero Flores-Aráoz, y a la viceministra Nuria Esparch. Vamos camino a la militarización “Estamos hablando más que de presencia de tropas extranjeras, del uso del territorio peruano para el acopio de información de inteligencia que será utilizada no por el gobierno del Perú, no por el Estado peruano, sino por agencias extranjeras”, subrayó. Añadió que eso demuestra que la cooperación militar norteamericana está siendo destinada a la militarización de la región y que el Comando Sur desea tener facilidad física que le permita extraer información de inteligencia porque no se va a instalar una base militar en el país propiamente dicha, “lo que se está haciendo es tener un espacio donde realice operaciones que, llegado el momento, sea de utilidad geopolítica y militar para EE.UU.”. Soberón hizo hincapié en que es evidente que este Centro de Operaciones de Inteligencia norteamericana, tiene el visto bueno del Comando Conjunto de las FF.AA., que sobrepasó el poder político y que, por lo tanto, la Comisión de Defensa del Orden Interno del Congreso y el pleno de Parlamento deben intervenir inmediatamente disponiendo las investigaciones del caso para aclarar esta situación. “Las Autoridades del Acuerdo Nacional deben tomar también cartas en el asunto; además de la Defensoría del Pueblo para que verifique si es que hay alguna relación entre la instalación y uso de estos instrumentales con la operación “Excelencia”, que para muchos analistas ha resultado un fracaso en el VRAE. |