Barquisimeto (Venezuela), 29 abr (ABI) Esa decisión boliviana fue respaldada de manera unánime por los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez; y de Nicaragua, Daniel Ortega; además del vicepresidente de Cuba, Carlos Lage, quienes, junto a Morales, suscribieron una declaración conjunta que cuestiona al CIADE y condena a las transnacionales que no respetan la soberanía de los Estados. La posición fue expresada por el Mandatario boliviano en rueda de prensa ante decenas de periodistas acreditados a la Cumbre de los países miembros de la Alternativa Bolivariana de las Américas (ALBA) que concluyó esta tarde, y que trabajó de manera conjunta con los movimientos sociales. “En Bolivia se va a respetar a las empresas que respetan las normas bolivianas, los contratos, que pagan sus impuestos, que invierten, pero en los últimos meses hemos encontrado a algunas empresas lamentablemente que no están respetando las normas bolivianas”, dijo el Jefe de Estado, quien no identificó a qué compañías se refería. Actualmente, el gobierno boliviano mantiene una controversia con la transnacional Euro Telecom Italia para recuperar acciones de la capitalizada Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Entel). No obstante, los ejecutivos de Telecom se niegan a negociar esa transferencia en territorio boliviano y anunciaron que acudirán a un arbitraje internacional. El Presidente boliviano señaló que las autoridades nacionales demostraron que esas empresas violaron las leyes y que “lo único que hacen es cómo amenazarnos, chantajearnos, ir a un arbitraje internacional, es una forma de cómo amedrentar a países”. Morales recordó que el Consejo Internacional de Arbitraje de Inversiones, a lo largo de su existencia, recibió muchas demandas de países, naciones y pueblos por el incumplimiento contractual de las transnacionales, pero que jamás ganaron alguna demanda. “Sólo ganan las empresas transnacionales y si alguien ganó una demanda fue Estados Unidos. Entonces para qué necesitamos esta clase de instituciones internacionales que solo favorecen a las transnacionales, por eso presentamos una propuesta de cómo retirarnos del CIADE”, argumentó el Primer Mandatario. Ante esta realidad, Bolivia presentó el proyecto de una declaración, la que fue aprobada de manera unánime por los países miembros del ALBA. El documento señala: “Los países miembros del ALBA-TCP rechazan enfáticamente las presiones jurídicas, mediáticas y diplomáticas de algunas empresas transnacionales que habiendo vulnerado normas constitucionales, leyes nacionales, compromisos contractuales, disposiciones regulatorias, medioambientales y laborales, se resisten a la aplicación de decisiones soberanas de los países, amenazando e iniciando demandas de arbitraje internacional contra los estados nacionales en instancias como el CIADE”. “En consecuencia, los Estados parte del ALBA-TCP acuerdan retirarse y denunciar de manera conjunta la convención del CIADE, garantizando el derecho soberano de los pueblos a regular la inversión extranjera en su territorio nacional”, agrega. El presidente boliviano agradeció el apoyo recibido y aseguró que los países tienen el derecho soberano de defender su economía, recuperar sus recursos naturales y poner al servicio del pueblo los servicios básicos. |