No más pobres en un país rico
José Alfredo Madueño / diariouno.pe / katari.org
Ganador en 16 regiones del país, Pedro Castillo representa las demandas de un Perú largamente ignorado por el centralismo limeño. Para el fundador de su Perú Libre, Vladimir Cerrón, estamos ante el mayor referente histórico de la izquierda peruana.
El conteo de votos realizado por la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), indicó que al 94.5% a nivel nacional, el candidato presidencial de Perú Libre, Pedro Castillo, obtuvo el 18.96% de los votos emitidos. Casi cinco puntos porcentuales más que su más cercana competidora, Keiko Fujimori de Fuerza Popular, quien alcanzó el 13.32% de las preferencias.
La abrumadora ventaja que el candidato nacido en Cajamarca obtuvo frente a sus adversarios, y que en regiones como Apurímac, Ayacucho y Huancavelica superan el 50% de la votación, a criterio de diversos analistas es una expresión del hartazgo por un sistema político de espaldas a sectores históricamente marginados.
Para la antropóloga Carmen Ilizarbe, la irrupción del candidato de Perú Libre da cuenta del fuerte cuestionamiento al modelo económico y pone por delante las grandes desigualdades existentes en el país.
“Creo que lo de Pedro Castillo pone por delante la cuestión de las grandes desigualdades, del centralismo limeño tan fuerte, tan potente, de las dificultades que tienen los sectores más rurales y menos urbanos para hacer escuchar sus demandas en el centro hegemónico del poder que es siempre Lima”, declaró a Ideeleradio.
Por su parte, la psicoterapeuta Carmen Gonzáles advirtió en sus redes sociales acerca de la conformación de una nueva “mesa social”, en la cual ahora sí estamos incluidos casi todos, especialmente los millones de peruanos del “Perú profundo, olvidado y despreciado”. “Esta votación logró lo que no pudieron hacer las políticas de inclusión. Los excluidos ya tienen representante”, escribió.
Terrorismo es el hambre
Pero la posibilidad de que Castillo llegue a Palacio de Gobierno también ha encendido las alarmas de los sectores más conservadores. Sobre los cuestionamientos y acusaciones en su contra, el candidato de Perú Libre señaló que por hablar de la realidad ha sido tildado de extremista, terrorista y parte del CONARE y Movadef. “Nos han terruqueado. Terrorismo es el hambre, es la miseria, es el abandono, son las grandes desigualdades, injusticias que se cometen en el país”, dijo.
Asimismo, indicó que no va a cambiar de discurso y que seguirá trabajando con los ronderos y padres de familia de la escuela donde trabaja, en Cajamarca. “Yo no me voy a cambiar de pelaje. Yo voy a trabajar e impulsar el desarrollo desde aquí, con mis padres de familia, con mis ronderos, con todos”.
Conecta con el pueblo
Consultado por Diario Uno, el fundador del partido Perú Libre, Vladimir Cerrón, destacó que en una elección sumamente fragmentada, Pedro Castillo fue el candidato “que más ha podido cohesionar al pueblo en medio de tanta división y diáspora política en el país”.
Consideró también que el voto a favor de Castillo expresa que “la mayoría del país está cuestionando de manera seria este sistema donde la pandemia ha expuesto los puntos críy donde el Estado ni el mercado responden a las expectativas”.
“Castillo ha sabido comunicar y además ha desplegado una campaña presidencial atípica frente a los demás partidos, en el sentido de que ha llegado a los lugares más lejanos, incluso a lugares donde otros candidatos no van. Por ejemplo, ningún candidato ha ido a la zona cocalera del Vraem, y si no van a esa zona álgida, ¿qué contacto pueden tener con la población y qué solución pueden proponer respecto a sus problemas?”.
Además, indicó que el atractivo de Castillo hacia las clases populares se debe no solo a su contenido político sino también a sus formas, pues representa al hombre andino con su lenguaje y mística de trabajo, siendo un maestro de una comunidad alejada de Cajamarca.
Acerca de la sorpresa con que varios sectores han tomado el primer lugar de Perú Libre en la primera vuelta, advirtió que “la gran prensa monopólica ha llegado a elaborar teorías falsas que en algún momento ellos mismos se la creen” “Por ejemplo, la teoría de que si ellos no hablan de determinado fenómeno, simplemente no existe en la realidad”.
Nuevo hito de la izquerda
Cerrón advirtió que los grandes medios de comunicación subestimaron a Castillo y trataron hasta el último de ningunear su candidatura. En contraparte, se preguntó cómo es que se explica que un candidato altamente promocionado por la prensa y al que en algún momento se le atribuyó más de 20% de preferencias, como George Forsyth, termine relegado y con el riesgo de no superar la valla electoral.
Por otro lado, refirió que con el triunfo de Castillo se abre un nuevo referente histórico de la izquierda peruana, superando al dejado por Alfonso Barrantes en las elecciones de 1985. En esa línea, remarcó que a diferencia de Izquierda Unida, Perú Libre llega en primer lugar en la primera vuelta, además de hacerlo con un programa propio y un candidato militante del partido. “Este es un partido provinciano, un partido del Perú profundo que no solo rechaza a la derecha centralista, sino también cuestiona a la izquierda criolla que no le resolvía los problemas”.
Pedro Castillo mantiene sus propuestas de campaña y llama al diálogo
Desde Chugur, en la región Cajamarca, el candidato presidencial por Perú Libre, Pedro Castillo, ratificó su propuesta de nacionalizar los recursos estratégicos del Perú, como el gas de Camisea, en el marco de una nueva Constitución.
Gas para los peruanos
“Nos ratificamos para que, en el marco de una nueva Constitución, rescatemos los recursos estratégicos del Perú. Que el gas de Camisea sea para los peruanos, hay que nacionalizarlo”, afirmó.
En conferencia de prensa, sostuvo que el oro, la plata, el uranio, el cobre y el litio tienen que ser para los peruanos. “Es necesario que los niños ya no tengan un futuro incierto”, agregó.
Castillo indicó que, gracias al apoyo de los ciudadanos, Perú Libre tiene la voz del pueblo en el primer poder del Estado. “A los 32 congresistas elegidos los vamos a direccionar para que no piensen en una curul, sino en ustedes”, resaltó.
Nada de hoja de ruta
Desde Cajamarca, descartó hacer una hoja de ruta para la segunda vuelta e hizo un llamado a los partidos políticos para realizar una concertación nacional.
El candidato de Perú Libre, Pedro Castillo, invitó a los candidatos que participaron en las elecciones generales, y representantes de los partidos políticos, a sentarse a conversar y lograr una concertación por el país, dejando diferencias políticas de lado.
“Saludar al país y convocar a los demás candidatos que no pasarían a la segunda vuelta, los llamo a nivel nacional, sentémonos a conversar, dejemos a un lado las posiciones partidarias, no se dejen llevar por lo que dicen, jamás me dejaría llevar por ciertos intereses”, indicó.
Castillo también saludó que algunas agrupaciones políticas se hayan adelantado y que ya han mostrado su apoyo, pues antes que cualquier objetivo político, les interesa el bienestar del país.
Amplia convocatoria
“Lo que se está haciendo es un llamado a una concertación, sentarnos a conversar por el país”, recalcó al afirmar que es necesario dejar de lado las diferencias políticas que se vieron en la primera vuelta electoral.
Castillo también hizo una convocatoria a las organizaciones vivas del país, los sindicatos, gremios y colectivos para sentarse a dialogar y generar coincidencias en esta nueva etapa.
Desde Chugur, en la región Cajamarca, agregó que las críticas en su contra son porque plantea “acabar con la planilla dorada”, en tal sentido, ratificó que, de ser el próximo presidente del país, seguirá con un sueldo de maestro.
Sobre los temas de su eventual gobierno, manifestó que el pueblo necesita educación, salud, justicia y un verdadero cambio. En tal sentido, dijo que debe fortalecerse las rondas campesinas, para luchar contra la delincuencia en el territorio nacional y los convocará para la defensa del pueblo, pero también para que colaboren en las acciones de fiscalización.
Recuperar los derechos
Junto a las rondas campesinas y maestros de Cajamarca, el candidato enfatizó que luchará contra el hambre, la miseria, la desigualdad y la injusticia que tanto daño hace a los ciudadanos peruanos.
Durante su alocución, indicó que es urgente que los ciudadanos se pongan de pie nuevamente en la segunda vuelta electoral para “recuperar los derechos constitucionales del pueblo” para que todos los menores puedan educarse adecuadamente en el país.
Al finalizar su discurso desde Cajamarca, el candidato presidencial de Perú Libre, exhortó que no se va a permitir más pobres, en un país rico como es el Perú.
Cerrón hace deslinde
Por otro lado, el secretario general de Perú Libre, Vladimir Cerrón, señaló, en entrevista con RPP, que de llegar su partido al gobierno él no aspira a desempeñar un cargo público. Aseveró también que otros grupos políticos le han “planteado tender puentes”, pero dijo no poder revelar cuáles son estos por razones de confidencialidad.
Cerrón también hizo un deslinde respecto al Movadef, al cual calificó de “brazo ideológico de un grupo terrorista”, en alusión a Sendero Luminoso. Indicó que en los dos gobiernos regionales que Perú Libre ha encabezado no se ha dado ningún acercamiento con grupos subversivos y dijo también que en ninguna parte de su ideario partidario se dice que conformen un grupo comunista.
Algo más
Al 97.039% de las actas procesadas por la ONPE, el candidato de Perú Libre, Pedro Castillo obtiene hasta el momento el 19.070% de los votos emitidos a nivel nacional, seguido por Keiko Fujimori de Fuerza Popular con 13.368%, Rafael López Aliaga de Renovación Popular con 11.676% y Hernando de Soto de Avanza País con 11.618%.
«No seamos complices de la acusada»
Antonio Castillo
Conocidos los resultados oficiales de las elecciones generales del domingo 11 de abril, son varias las conclusiones que se desprenden de este acontecimiento:
PRIMERA: Hay coincidencia general en que el Perú profundo y olvidado ha hecho sentir su voz de indignación y protesta, votando por la candidatura de izquierda popular que representa Pedro Castillo, indignación que se veía venir en cualquier momento, dada la grave crisis sanitaria que se ha llevado la preciosa vida de más de 140 mil peruanos, la mayor parte de estos por falta de atención médica y de oxígeno medicinal para poder salvarse.
SEGUNDA: La irrupción inusitada de dicho candidato, ha constituido un baño de agua fría para la clase política, muchos de los cuales se preguntaron recién:
¿y éste quién es?
¿de dónde salió? y
¿cómo es que no lo vimos?
Desconocimiento que es consecuencia del olvido y desdén antes aludidos, ya que Castillo estuvo en Lima liderando la masiva huelga de maestros del 2017, que colmó la Plaza San Martín por varios días en efervescentes manifestaciones gremiales, pero luego ningunearon su existencia; creyendo en la imposibilidad de que un maestro de escuela rural logre el salto cualitativo que hoy ha puesto en jaque a los dueños del poder.
TERCERA: Si el voto de Castillo es de indignación, el de Keiko es del miedo que busca la protección de “mano dura”, pero que ha perdido el sentido de lo digno, porque no se le revuelve el estómago al desear en el solio presidencial a quien está acusada de liderar una organización criminal y lavar plata oscura de la corrupción; haber sumido al país en la peor crisis política en los últimos tiempos desde el Congreso disuelto, ni, mucho menos, el pasado criminal y corrupto del gobierno dictatorial de su padre al que ella representa, y ha prometido indultar, al haber sido su primera dama.
CUARTA: Es necesario reconocer que, si bien la candidatura de Castillo es producto de la indignación, también es cierto que ha despertado el temor de muchos sectores democráticos por sus antecedentes ideológicos, así como por rumores y sospechas de supuesta vinculación con el Movadef; por lo que corresponderá a él y a su entorno despejar toda duda al respecto.
Por lo pronto, ha dicho que es absurda tal vinculación, ya que es integrante de las rondas campesinas y éstas han combatido a SL. Es pertinente agregar aquí que, conocidos los primeros resultados, no se la ha oído palabra ni expresión exaltada, violentista o cosa que se le parezca; todo lo contrario: previo al desayuno electoral, y alrededor de su humilde mesa (en la que lucían sabrosos choclos, panes y queso serrano, así como una humeante sopa verde cajamarquina), lo hemos visto rezar públicamente cogido de la mano de su esposa, hijos y familiares, lo cual dice de la profunda fe católica que profesa.
QUINTA: Si quiere realmente ganar la segunda vuelta, deberá asumir la gran responsabilidad de lograr consensos y hacer alianzas que le permitan sumar votos y el apoyo necesario, flexibilizando razonablemente sus planteamientos maximalistas para hacerlos viables, sin abdicar de lo fundamental que es atender las reivindicaciones históricas de las mayorías (a las que muchos ya habían renunciado perdiéndose en lo contrario, y allí tienen los resultados), la recuperación de la soberanía sobre nuestros recursos naturales y la convocatoria a referéndum para una Asamblea Constituyente, y que sea el pueblo el que decida libremente y sin imposición alguna.
SEXTA: Deberá hacer acopio de realismo para entender que mucho de su crecimiento inicial en esta campaña se debió a la cobertura de algunos medios, como una estrategia de quitarle votos a Verónica Mendoza, aunque después cobró fuerza propia y ya no lo pudieron detener.
Sin embargo, éste es otro escenario y aquellos que lo popularizaron son los mismos que hoy lo terruquean, por lo que su contra estrategia deberá apuntar a inspirar confianza si desea ganar la segunda vuelta; de lo contrario, veremos a la acusada Keiko Sofía Fujimori entrar a Palacio de Gobierno el próximo 28 de julio.
SÉPTIMA: Para nosotros, lo principal en esta crucial etapa es evitarle esa cruel deshonra al país, usando todos los medios democráticos y constitucionales, porque nuestro más elemental sentido ético no concibe que una ex presidiaria y hoy acusada de graves delitos en organización criminal sea la presidenta del Bicentenario, consagrándonos como el más vergonzoso y vil reino de la impunidad.
Si dos presidentes fueron vacados por incapacidad moral, al tener investigación preliminar por eventuales coimas, poner ahora en el gobierno a una acusada por lavado de activos, para quien el valiente fiscal José Domingo Pérez ha pedido 30 años de cárcel, en una sólida acusación de más de 15 mil páginas, constituiría el vejamen más grande de nuestra vida republicana, que no lo podemos permitir; bajo apercibimiento de ser nosotros los acusados de complicidad, degeneración y cobardía en el juicio implacable de la historia a que nos someterán las nuevas generaciones.