Cardenal Terrazas, unión juvenil

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    ¿Terrazas Sandoval asila terroristas en la Catedral?

Flavio Dalostto
Crónicas de la Batalla por la Media-Luna III
¿Qué ha quedado del otrora poderoso grupo neo-nazi que esgrimía en sus camionetas cruces esvásticas y saludaban al estilo hitleriano, provocando el enmudecimiento de la mayor parte del Pueblo Cruceño?

Los últimos jóvenes cruceñistas, refugiados bajo las polleras del Cardenal Terrazas Sandoval. El tiempo de gloria en que la terrorista unión juvenil cruceñista (ujc), desplegaba 3.000 «militantes» armados hasta los dientes para amedrentar collas, opositores o imponer paros «cívicos» y estatutos separatistas, parece haber entrado en su ocaso.

curasLa noticia que David Sejas y Alfredo Saucedo, líderes de la ujc, junto a un grupúsculo de «leales», se habrían refugiado en la Catedral de Santa Cruz, sede del Cardenal de los cruceñistas, el Obispo de los terratenientes, Julio Terrazas Sandoval, que «casualmente» en estos días arrecia sus críticas políticas contra Evo Morales, utilizando el púlpito de la iglesia.

Qué lejos que estamos del tiempo del imperio cruceñista, cuyas hordas asolaban la ciudad cruceña y hostigaban al Plan Tres Mil, golpeaban policías y militares desarmados, incendiaban y saqueaban oficinas públicas y llevaban avionetas con explosivos para hacer volar el gasoducto a Brasil!

De todo ese terror furibundo, hoy queda el lamentable saldo de un masacote apelotonado de temerosos de la justicia, que corrieron a refugiarse bajo las polleras de su amigo y consejero espiritual, el Obispo Julio Terrazas Sandoval.

Claves son para entender esta situación, las palabras proferidas por uno de sus líderes, David Sejas: «Asilo político aquí en la Iglesia, porque no hay garantías constitucionales aquí en el País».

Con esta contunedente confesión, el dirigente autonomista asilado ha comprometido seriamente a la Catedral de Santa Cruz, dando a entender que la Iglesia es otro estado, fuera de la jurisdicción boliviana.

Con esto, y si no hay contrario por parte del Cardenal Terrazas Sandoval, quedaría en evidencia el apoyo institucional de la Catedral Cruceña a los terroristas.

Branko Marinkovich, nuevamente «evaporado»
Hace unas semanas, cuando la cosa se ponia fea para el ex-prefecto de Pando, Leopoldo «Herodes» Fernández y varios de sus compinches, el líder cruceñista, el terrateniente Branko Marinkovich se había «evaporado», y sus allegados decían «está haciendo negocios en el Beni».

Después nos enteramos que Marinkovich andaba de «gira» por varios países buscando un «protectorado». Ahora, que habría una orden de captura en su contra, vuelve a «evaporarse», y sus allegados dicen «anda haciendo campaña por el NO a la Nueva Constitución, en las provincias».

Su mayordomo, el indio que trabaja de indio, Victor Hugo Vel-Asco, está muy preocupado por su jefe, y anda diciendo que ¡Evo Morales lo quiere matar! La preocupación de Vel-Asco, es sobre quién le va a tirar unos pesos, si su jefecito queda tras las rejas, o quién le va a pagar los 40 abogados que va a necesitar.

Otro que quedó poniendo la cara es el vice-presidente del Comité Pro-Santa Cruz, Luis Nuñez, que ya no sabe que inventar para justificar la ausencia del «líder moral de los cruceños», que nunca está cuando las papas queman.

Mientras, todos los perejilitos detenidos por terrocívicos, como José Vaca, Jimmy Benítez, Domingo Moreno, Reynaldo Bayard y los hermanos Salazar, están cantando el repertorio entero de los Kjarkas, y estarían involucrando seriamente a Branko Marinkovich, a Mario Cossio y otro prefecto opositor, en la planificación del golpe cívico-prefectural de agosto y setiembre pasado.

Se dice que las declaraciones de los detenidos tienen tantos lujos de detalles, que se podría escribir el guion de una película entera.

Mario Cossio, el rebelde de Tarija, a Todo o Nada
El mutismo de Ernesto Suárez. Resulta llamativo que Cossio, cuyos líderes «cívicos» regionales, están presos en La Paz, sea quien muestra más nerviosismo ante el hecho que éstos están declarando TODO lo que pasó en la voladura del gasoducto Yacuiba-Río Grande, que alimenta la industria paulista de Brasil. Se dice, también que ¡estaría preoparando un viaje!

Mario CossioAl enterarse, que la justicia podría librar una orden de captura contra él, manifestó que volvería a repetir las jornadas violentas de agosto y setiembre, si se trata de defender los intereses de Tarija. Cossio está jugado, y solo le quedaría ir preso o fugar.

Todo indicaría que alguno de los apresados en La Paz, lo habría señalado como partícipe de las reuniones de la localidad chaqueña de Villamontes, donde se gestó la asonada contra el gobierno de Evo Morales.

Otro al que no se le escucha la boquita es al prefecto de Beni, Ernesto Suárez Sátori, que se quedó sin palabras, igual que antes lo hiciera Mario Cossio. Se van pasando el voto de silencio del uno al otro.

El resto de los líderes terrocívicos, sin saber que hacer
Jorge Melgar, líder cívico de Beni; Patricia Galarza, líder cívica de Tarija; Jhon Cava, líder cívico de Sucre; Aydée Nava, alcaldesa de Sucre; Sabina Cuellar, prefecta de Chuquisaca; y Rubén Costas, prefecto de Santa Cruz, no saben que hacer.

Hablan de medidas «legales» y «pacíficas», para contrarrestrar las acciones del gobierno de Evo Morales; pero ninguno sale a manifestar una salida violenta, en defensa de los detenidos y de si mismos (por ahora).

Están entre la espada y la pared, sin salida. Si quedan quietos, es probable que eso no detenga una orden de aprensión contra ellos.

Si se hacen los «guapos», quedarían en evidencia como violentos, y le darían más argumento a las detenciones. Nunca pensaron que la justicia llegaría hasta ellos, los cabezones.

Creyeron que con la perejilada alcanzaba para Evo; pero la perejilada no está dispuesta a pagar sola los platos rotos de la aventura golpista del cruceñismo. A riesgo de ser reiterativo, los malos no tienen amigos.

Bolivia recupera soberanía sobre la región del Alto Parapetí
El INRA, está recuperando soberanía sobre la rebelde región ganadera del Alto Parapetí, en el Chaco cruceño. Después de la toma del estado subversivo de Larsenlad, el resto de los grandes ganaderos se quedaron paralizados, y empiezan a colaborar con los funcionarios encargados de la reforma agraria.

Un grupo de ganaderos, los pequeños y medianos, están conformes porque titularán sus propiedades.

Los grandes, en cambio, están preocupados, porque les cuesta demostrar que sus latifundios no tuvieron ni tienen esclavos.

Algunos hacendados habrían corrido de sus predios a pobladores guaraníes, para que no los denuncien.

Otro logro del INRA es que varios medianos hacendados, han inscripto a sus trabajadores con todas las exigencias de la Ley y sus correspondientes beneficios sociales.

Cabe recordar que si algún predio mantiene a sus trabajadores en condiciones de servidumbre, o tiene fracciones de sus tierras improductivas, éstas vuelven a las manos del estado boliviano, para ser re-distribuídas entre campesinos e indígenas.

¿Fueron paraguayos, los del ataque al puesto militar?
4 hombres montados en motocicletas asaltaron un puesto militar boliviano, cerca del punto trifinio entre Bolivia, Paraguay y Argentina. Los asaltantes redujeron a los militares que custodiaban el puesto, y se robaron 6 fusiles FAL, y se dieron a la fuga.

Varios medios de comunicación bolivianos afirmaron que serían paraguayos (uno, lo afirmó tajantemente). Ahora, me pregunto, ¿por qué se arriesgarían 4 paraguayos a tomar un puesto militar, para robar 6 fusiles? No es lógico.

Además, se aseguraron que los soldados bolivianos «los oyeran hablar en tonada paraguaya».

Me inclino más por un grupo de terrocívicos tarijeños, haciéndose pasar por paraguayos. No olvidemos que el lugar está cerca de Villamontes, ciudad donde se gestó el golpe de estado cívico-prefectural.

¿El fin? En su desesperación, los «civicos» chapacos, estarían tratando de crear un incidente con Paraguay, para distraer la atención boliviana sobre ellos, y ganar tiempo.

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